La orquídea piramidal (Anacamptis pyramidalis) es una especie de planta herbácea perenne que pertenece a la familia de las orquidáceas. Se caracteriza por tener un tallo erecto y robusto, de hasta 60 cm de altura, con hojas basales lanceoladas y flores de color rosa, violeta o blanco, dispuestas en una inflorescencia densa y cónica. Las flores tienen un labelo trilobulado, con el lóbulo central más grande y con manchas oscuras, y un espolón largo y curvado hacia abajo. La orquídea piramidal florece entre abril y julio, y se reproduce por semillas o por bulbos subterráneos.
Esta planta tiene una amplia distribución geográfica, que abarca Europa, Asia occidental y el norte de África. Se encuentra en hábitats diversos, como prados, pastizales, bosques claros, dunas o zonas rocosas, desde el nivel del mar hasta los 2000 m de altitud. Prefiere suelos calcáreos, bien drenados y con exposición soleada o semi sombra. Es una especie resistente al frío y a la sequía, pero sensible al exceso de humedad.
La orquídea piramidal tiene un gran valor ecológico, ya que es una importante fuente de néctar para los insectos polinizadores, especialmente las abejas y las mariposas. También tiene un valor ornamental, por su belleza y colorido, y se puede cultivar en macetas o en jardines. Para ello, se recomienda usar un sustrato ligero y aireado, con arena o grava, y regar moderadamente durante la época de crecimiento. No se debe abonar en exceso, ya que puede favorecer el desarrollo de hongos. Se debe evitar el trasplante frecuente, ya que puede dañar los bulbos. Se puede propagar por división de los bulbos en otoño o por semillas en primavera.
La orquídea piramidal es una planta con propiedades medicinales, ya que se ha usado tradicionalmente para tratar afecciones respiratorias, digestivas y nerviosas. También se le atribuyen efectos afrodisíacos y antidepresivos. Sin embargo, se debe tener precaución al consumir esta planta, ya que contiene alcaloides tóxicos que pueden causar irritación, náuseas, vómitos o convulsiones. Además, se trata de una especie protegida por la legislación europea, por lo que se debe respetar su conservación y evitar su recolección indiscriminada.
