La Armeria maritima (Mill.) Willd es una planta herbácea perenne que pertenece a la familia de las plumbagináceas. Se caracteriza por tener unas hojas lineares, estrechas y de color verde oscuro, que forman una roseta basal. Las flores son pequeñas, de color rosa o blanco, y se agrupan en capítulos globosos que se elevan sobre un tallo floral sin hojas. La floración se produce desde la primavera hasta el otoño, y las flores tienen un agradable aroma.
Nombres comunes
Herba de namorar, Clavel de playas, Navadni pečnik, Clavelina de mar, Botoncitos.
Esta planta es originaria de las zonas costeras de Europa, Asia y América del Norte, donde crece en suelos arenosos, salinos y pobres en nutrientes. Soporta muy bien la sequía, el viento y la salinidad, por lo que es una especie muy resistente y adaptable. Se utiliza como planta ornamental en jardines, rocallas, borduras y macetas, ya que tiene un aspecto muy decorativo y requiere pocos cuidados. También tiene propiedades medicinales, ya que se le atribuyen efectos diuréticos, astringentes y cicatrizantes.
Para cultivar la armeria marítima se debe elegir un lugar con mucha luz solar directa y una buena ventilación. El suelo debe ser ligero, bien drenado y con un pH neutro o ligeramente ácido. No tolera los suelos arcillosos, pesados o encharcados. Se debe regar con moderación, evitando el exceso de humedad que puede provocar la pudrición de las raíces. Se recomienda abonar con un fertilizante mineral de baja concentración una vez al mes durante la época de crecimiento.
La multiplicación de la armeria marítima se puede realizar por semillas o por división de mata. Las semillas se siembran en primavera, en un sustrato húmedo y a una temperatura de unos 20°C. Las plántulas se trasplantan cuando tengan unos 10 cm de altura. La división de mata se hace en otoño o en primavera, separando los brotes laterales con cuidado y plantándolos en el lugar definitivo.
La armeria marítima no suele presentar problemas graves de plagas o enfermedades, siempre que se respeten sus condiciones de cultivo. Sin embargo, puede ser atacada por pulgones, ácaros o caracoles, que se pueden combatir con insecticidas o remedios ecológicos. También puede sufrir hongos como el mildiu o la roya, que se previenen con una buena aireación y un riego adecuado.