El cebollino (Allium schoenoprasum L.), también conocido por Cebollino, Ciboulette, Cebollin, Cebolleta, Cebollino común, Cebolla china, es una planta herbácea perenne que pertenece a la familia de las liliáceas, junto con otras especies de Allium como la cebolla, el ajo, el puerro y la cebolleta. Se caracteriza por sus hojas tubulares, huecas y cilíndricas, de color verde azulado, que se utilizan como condimento en la cocina por su sabor suave y aromático. Sus flores son de color rosa violáceo y forman cabezuelas globosas que también son comestibles y decorativas.
El cebollino es originario de las regiones frías del norte de Europa y Asia, donde crece de forma silvestre en prados y roquedos húmedos. En la península ibérica se distribuye por la mitad norte, especialmente en zonas montañosas. Se cultiva desde hace siglos por sus propiedades culinarias y medicinales, ya que tiene efectos diuréticos, antisépticos y relajantes. Favorece la eliminación de cálculos renales y de vejiga, alivia los cólicos nefríticos y ayuda a prevenir infecciones respiratorias.
Para cultivar el cebollino se puede partir de semillas o de división de mata. Las semillas se siembran en primavera, enterrándolas unos centímetros en un suelo rico y bien drenado. El trasplante se realiza cuando las plantas tienen unos 15 cm de altura, dejando una distancia de unos 10 cm entre ellas. El cebollino necesita mucha luz y riegos frecuentes, pero no abundantes. Se puede cultivar en macetas o jardineras, siempre que tengan un buen drenaje. Se recomienda abonar el suelo con compost o mantillo antes de la siembra o el trasplante.
La recolección del cebollino se hace mediante cortes según se necesite, desde la primavera hasta el otoño. Se deben cortar las hojas dejando unos 3 o 5 cm desde la base, para favorecer la emisión de nuevas hojas. Las flores se pueden cortar cuando están en plena floración, entre mayo y junio. Tanto las hojas como las flores se pueden consumir frescas o secas, aunque pierden parte de su aroma al deshidratarse. Se pueden añadir a ensaladas, tortillas, cremas, quesos, vinagretas y otros platos.
El cebollino es una planta muy fácil de cultivar y muy versátil en la cocina. Además, tiene un gran valor ornamental por sus flores vistosas y duraderas, que se pueden usar en arreglos florales o como borduras en el jardín. Es una planta que aporta color, sabor y salud a nuestro hogar.