Los huertos urbanos o domésticos, como también se les conoce, son cultivos situados en pequeños espacios de tierra, terrazas, o jardines de las ciudades, los cuales son generalmente públicos. Se aprovechan de esta manera las áreas pequeñas cerca de ventanales o patios.
La finalidad del huerto urbano es sembrar de manera sustentable y ecológica distintas clases de verduras, frutas, hortalizas plantas medicinales y aromáticas para consumo del cultivador. Se considera una técnica de sembrado que posibilita economizar tiempo, trabajo y dinero. Incentiva la enseñanza sobre cultivos y el sano esparcimiento. Tuvo su origen en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, donde empieza a utilizarse esta forma de cultivo en las ciudades, y se alcanzan a consumir hasta un 40 % de alimentos provenientes de los huertos urbanos.
Ventajas de los huertos urbanos
Esta manera de sembrar tus propios alimentos como hortalizas, verduras y frutas y sin la requerir disponer de un extenso campo donde llevar a cabo el plantel, presenta numerosas ventajas sobre alimentación, salud, medio ambiente y otros aspectos.
Esta clase de huertos, también denominados “jardines comestibles”, benefician el entorno ambiental; pues, por una parte, contribuyen con el paisaje urbano agregando vegetación y colorido, además, estimulan el consumo local y el autoconsumo. También reducen el uso de pesticidas, disminuyendo de esta manera los renombrados gases de efecto invernadero
Incentiva la alimentación natural, fresca y saludable
Tener un huerto urbano es una gran ocasión para incrementar la ingesta de hortalizas, verdura y frutas totalmente frescas de temporada. Degustar el verdadero sabor de esos alimentos es factible mediante tu propio cultivo en macetas. Asimismo, podrás usar medios naturales en vez de pesticidas para resguardar las plantas.
Fomenta una educación asentada en una vida sana
Promueve el sano esparcimiento del grupo familiar, fraccionando las labores donde todos los miembros pueden participar. Es una evidente opción para relajarse y como método anti estrés para adultos. Vincularse y disfrutar de la naturaleza es una alternativa para estar más serenos y mejorar el humor. Si siembras en terreno como si lo haces en macetas, el palpar la tierra te pone en contacto con la naturaleza y tus hijos se distraerán, aparte de aprender. El hecho de que ellos vean desarrollarse las frutas y verduras los animará a probar nuevas cosas que quizás no han probado, y a degustar de la comida.
Contribuye en ahorrar dinero y seguir una vida más sustentable
El empleo de terrazas para huertos urbanos se reconoce como “cubiertas verdes”, técnica que contribuye a reducir la temperatura de las edificaciones. En este sentido, se ahorra en climatización y en el costo de los productos alimenticios.
Pasarás más tiempo en familia
Alternar en actividades con tus hijos es esencial para procurar ambientes de confianza, para educar y establecer una efectiva comunicación.
Fomentarás la agricultura de tu localidad
Como es sabido, una de las dificultades más significativas de la agricultura es la contaminación que genera el transporte de los productos del agro como verduras, frutas y hortalizas teniendo un huerto urbano contribuirás a disminuir ese transporte y estarás protegiendo el medio ambiente.
Evitarás el uso de plásticos
Buena parte de las frutas y verduras se encuentran envueltas en plásticos de un único uso que contaminan el medio ambiente. No obstante, con el huerto urbano disminuirás el uso de plásticos que contaminan.
