El olivo, algo más que un árbol
El olivo es un árbol muy preciado por su fruto comestible del cual se extrae el aceite de oliva utilizado en la preparación de las comidas. La Olea europea, como se le conoce científicamente, proviene de la familia de las oleáceas originaria de Asia menor, es una de las especies frutales más cultivables por ser resistentes al frío, a la sequía y por su fácil adaptación a todo tipo de suelos.
Esta planta de clima mediterráneo, que puede llegar a durar muchos años, se caracteriza por su tronco recto, grueso y con tonalidades grises, además de hojas lanceoladas cuyo anverso es de color verde oscuro y de envés blanquecino. Contienen flores pequeñas con cuatro pétalos de color blanco y un fruto de gran valor nutritivo conocido como aceituna u oliva, con tonalidad que va del verde al rojo y que al madurar se torna de color negro.
El olivo es un árbol de lento crecimiento que con los años puede llegar alcanzar hasta los diez metros de altura, sin embargo, esto no impide que pueda ser cultivado en el jardín de su casa, en macetas o cualquier tipo de depósito debido a que se adaptan fácilmente a recipientes de diferentes tamaños siempre y cuando se cumpla con los siguientes cuidados:
Clima. A pesar de que el olivo se adapta a cualquier tipo de clima se recomienda, por ser plantas provenientes de climas cálidos, no exponerlas a temperaturas inferiores a los 0° C., por tal motivo se deben ubicar en lugares donde reciban la luz solar durante gran parte del día ya sea en el jardín de la casa o cerca de una ventana en caso de tenerlo en macetas.
Suelo. Se adaptan fácilmente a cualquier tipo de suelo que estén provistos o no de nutrientes, a excepción de tierras con un elevado contenido de humedad por tratarse de una planta que no tolera el exceso de agua. Se recomienda al momento de plantarla en macetas utilizar un sustrato que contenga turba mezclada con grava o arena de modo de facilitar el drenaje del agua al momento del riego. Esto evitará la acumulación de agua y la proliferación de hongos que le puedan ocasionar algún daño.
Abono. Se recomienda, al comenzar la primavera, añadir a la tierra un abono orgánico ecológico por lo menos una vez al año por tratarse de una planta que no requiere de muchos nutrientes para su desarrollo.
Riego. El riego dependerá de la etapa de crecimiento del olivo, si se trata de un planta joven se recomienda regar con frecuencia durante los primeros años evitando el exceso de humedad en la tierra que puede ocasionar que la raíces se pudran, en la etapa adulta se aconseja disminuir el riego por ser árboles con capacidad para aguantar periodos de sequía, pudiendo mantenerse únicamente con el agua de lluvia que reciben.
Cultivo. El cultivo de olivo debe hacerse preferiblemente en primavera en un lugar donde reciba varias horas de luz solar al día. Tome en cuenta que el crecimiento y desarrollo de la planta depende del riego fundamentalmente cuando se observe que la tierra está seca.
Poda. Se recomienda cortar cada año aquellas ramas que no proveen fruto a la planta o se encuentren en mal estado. Hágalo finalizando febrero o marzo de manera que el frío ayude a secar cualquier herida que pudiese haber ocasionado al momento de la poda.
Reproducción. La multiplicación de los olivos se logra a través de la siembra de estacas pequeñas en un ambiente de clima cálido y dentro de una base preparada para el drenaje del agua. Una vez que haya transcurrido un mes y medio se procede a trasplantar la planta.
Otra forma de reproducción es por semillas, el procedimiento consiste en hacerle un corte a la cáscara para favorecer el proceso de germinación, seguidamente se envuelven en estiércol y transcurridos veinte días, cuando la planta comience a desarrollarse, se coloca en la maceta o se procede a sembrar en cualquier otro lugar.
Esta planta perdurable en el tiempo no requiere de grandes condiciones para su cultivo, desarrollo y crecimiento debido a su facilidad para adaptarse a tierras sin muchos nutrientes y poca humedad. Es poseedora de un fruto de gran provecho en la preparación de comidas, al mismo tiempo proporciona un aceite natural rico en ácidos grasos mono insaturados muy beneficiosos para la salud del corazón y para la absorción de vitaminas por parte del organismo.
La Olea europea por su variedad de tamaños puede ser plantada en el jardín de su casa, en una maceta o en cualquier otro espacio ya sea por un propósito ornamental o simplemente para la obtención de su fruto, todas esas características antes mencionadas hacen de el Olivo algo más que un árbol.