Cuando nos referimos a la Rosa, estamos hablando de la flor de la planta conocida como Rosal, uno de los géneros florales más apreciado en el mundo entero, con un importante significado y gran valor comercial y económico.
Las Rosas poseen una hermosura especial y un aroma indescriptible. Simbolizan el amor, la pasión, también han estado presente como símbolo en la guerra y en la paz. Asimismo, se le atribuyen significados religiosos. Igualmente, la literatura y el arte ha sido impregnada por esta hermosa especie floral, muchas veces ha sido incluida en las creaciones de grandes y reconocidos autores.
Se cree que su cultivo tuvo sus inicios en China hace no menos de cinco mil años. No obstante, de acuerdo con algunos estudiosos de la especie, este género tiene presencia en la Tierra desde hace aproximadamente 35 millones de años.
Es muy utilizada en la industria cosmética por sus cualidades, su aroma y belleza.
Uso ornamental de la Rosa
Las Rosas son hermosas, de colores variados que van desde el blanco hasta el carmesí, con tonalidades nítidas y brillantes. Un ramo de Rosas no puede faltar en un cumpleaños, boda o acontecimiento importante.
Los arreglos florales con Rosas los puedes realizar, tanto para regalos, lo cual sería un detalle sutil y significativo, hasta como centros de mesa, logrando un alto valor decorativo y ornamental, un salón adornado con rosas habla por sí solo.
Las Rosas acompañadas de las delicadas Paniculata, resultan espectaculares cuando de ramilletes se trata. También en ocasiones especiales para arreglos u obsequios discretos, pero significativos y elegantes.
Los jardines cobran un toque especial cuando lucen en ellos Rosales con su diversidad de colores. También pueden cultivarse en interiores. Hermosos jarrones o macetas de Rosas, dan un toque distinguido a tu hogar o al espacio en que desees cultivarla.
Descripción Botánica de los Rosales
Los Rosales son arbustos espinosos pertenecientes a la familia de las Rosáceas. Está constituida por cerca de 150 especies y casi 30.000 híbridos. Hoy en día, se le encuentra en casi todo el planeta, pero fundamentalmente en el hemisferio norte.
Estas plantas alcanzan a medir cinco metros de altura en su mejor desarrollo, otras pueden logar 2 o más metros.
Sus tallos son por lo general rectos y semi leñosos con espinas fuertes y presentan diferentes formas.
Sus hojas varían entre perennes y caducifolias con bordes aserrados, en cuyo borde suelen encontrarse glándulas odoríferas.
Sus flores conforman racimos de inflorescencias. Son hermafroditas, de gran hermosura y como lo hemos mencionado, de variados colores y fragancia especial.
El conocido escaramujo, es el fruto de esta planta, son pequeños y de color rojo al madurar. Esta fruta es una fuente natural de vitamina C, además se le atribuyen propiedades para rejuvenecer.
Clasificación de los Rosales
Entre la gran variedad de plantas de Rosales vamos a nombrar en esta clasificación las que encontramos con mayor frecuencia en jardines y las más conocidas en la comercialización, bien sea para uso ornamental o industrial.
Según su origen y de acuerdo a su procedencia, los Rosales se clasifican en:
De Asia: Suelen estar dentro de las trepadoras, entre ellas se encuentran las Rosa baksiae o la Rosa bracteata.
Del Medio Oriente: Entre este grupo hallamos la Rosa foetida.
De América: Por lo general se distinguen por sus llamativos colores como la Rosa foliolosa.
Europea: Se distinguen por aroma y por sus colores blanco o rosadas. Soportan la variación climática y poseen espinas de considerable robustez. Entre ellas encontramos la Rosa canina y la Rosa gallica.
Otra clasificación viene dada por:
Rosas antiguas, entre las que se cuentan la Damascena, Centifolia, Alba, Borboniana, De té entre otras que por su extensión no vamos a nombrar.
Rosas modernas, entre estas tenemos las Miniaturas, Tapizantes, Arbustivas, Enredaderas, Híbridos de té, Floribundas.
Cultivo y cuidado de los Rosales
Las plantas de Rosales suelen ser muy resistentes, al igual que el resto de los árboles, requieren condiciones mínimas para su desarrollo sano.
En el caso del cultivo de Rosales, la primera consideración a tomar en cuenta es el tipo o la especie que desees cultivar, esto debe estar en correspondencia con las condiciones climáticas del lugar donde te encuentres.
Iluminación: estas plantas exigen suficiente luz solar, deben tener una exposición al sol de por lo menos 6 horas al día para desarrollarse sanamente. Este aspecto debes tomarlo en cuenta si piensas cultivar en el interior de tu hogar.
Igualmente, debes proteger tu planta de los vientos fuertes.
Temperatura: estas plantas requieren climas cálidos para su crecimiento óptimo. Las temperaturas ideales van desde los 15 grados hasta los 25.
Suelos: las plantas de Rosales se adecuan mejor en suelos arcillosos o limosos, los cuales se pueden mejorar con suficiente estiércol y basalto. Debe poseer un pH básico.
Riego: este aspecto es de vital importancia para el desarrollo de la planta. En épocas calurosas debe dedicarse atención, sobre todo en el periodo vegetativo de la planta. Para la época de invierno, cambian las necesidades de riego y la frecuencia se reduce.
Lo importante es que el suelo se mantenga húmedo evitando los excesos y los encharcamientos.
Poda: la poda correcta o adecuada de la planta de Rosal es la que se ejerce para garantizar su crecimiento y darle forma a la planta. Esto debe hacerse en invierno, en este proceso se deben retirar las hojas y las rosas marchitas, logrando así el brote de nuevas más bellas y frondosas.
Recuerda hacerlo en invierno y con las herramientas adecuadas y desinfectadas.
Siguiendo nuestros consejos, puedes cultivar tu planta de Rosal y obtener unos bellos ejemplares. Ánimo.
