Antes de comenzar los preparativos para contar con mini huertos en casa es importante tener claro el tipo de plantas que desea cultivar, usos, cuidados y propiedades de las mismas, así como también la disponibilidad y condiciones del espacio donde ubicarlas o plantarlas.
A continuación le recomendamos una variedad de plantas fáciles de cultivar y de grandes beneficios para tener en casa una vez que decida ser dueño de un mini huerto:
Tomates. De gran utilidad en la cocina, es una planta de largas raíces por lo que se recomienda plantarla profundamente en la tierra en un lugar con suficiente luz y regarla con poca agua para evitar la aparición de hongos.
El tomate es muy rico en potasio, fósforo y en vitaminas A, C y E. Su consumo ayuda a prevenir enfermedades de corazón, diabetes y cáncer.
Zanahorias. Esta planta de hortaliza fácil del cultivar, puede sembrarse en cualquier momento del año, se recomienda regar constantemente durante su etapa de crecimiento para mantener la humedad en la tierra y así evitar el agrietamiento de las raíces. Posee altas propiedades nutritivas ya que son ricas en vitaminas A y antioxidantes, de gran utilidad para combatir el estreñimiento, fortalecer los dientes y encías y para la vista.
Pimientos. La planta de pimientos es sensible a temperaturas muy frías por lo que requiere de sol y riego constante, se recomienda plantar las semillas en época de primavera. Sus hortalizas en colores verdes, rojos y amarillos son ricas en vitaminas C y B6 y en nutrientes como la tiamina, folacina y manganeso, posee también capsaicina que es una sustancia con efectos analgésicos.
Cebollas. Es una planta de raíces poco profundas, no requiere de muchos cuidados, un riego regular y espaciado en la etapa de formación del bulbo es suficiente. Contiene vitaminas del grupo B, minerales y oligoelementos como potasio, magnesio, fósforo, calcio, sodio, azufre entre otros.
Pepinos. Esta planta de mediano tamaño produce una gran cantidad de pepinos colgantes durante todo el verano, se recomienda un riego regular con poca agua y sembrar las semillas a poca profundidad para el mejor crecimiento de las raíces.
Espinacas. Es de gran duración y muy resistente a épocas de invierno, no requiere de mucho sol y se puede cultivar en pequeños huertos con alto contenido de materia orgánica por lo que se recomienda abonar antes de sembrar, se debe mantener una separación de 30 centímetros entre cada planta y regar con poca agua, cuidando mantener la humedad de la tierra.
La espinaca es un alimento con propiedades antiinflamatorias, ayuda a regular la presión arterial y a mejorar el metabolismo, no es aconsejable consumir en grandes cantidades regularmente por su contenido de ácido oxálico que puede ocasionar cálculos renales.
Ajo. Es una de las plantas más fáciles de cultivar, inclusive en suelo seco porque no necesita mucha agua para su crecimiento, solo se requiere sembrar un diente de ajo en cualquier temporada del año, preferiblemente en invierno.
El ajo contiene sustancias que contribuyen a inhibir la coagulación de la sangre, prevenir daños en las células y evitar la proliferación de bacterias que puedan causar ciertas enfermedades.
Calabazas. Estas plantas necesitan de suficiente espacio para crecer, las semillas se siembran en suelo húmedo y con buen drenaje, requieren de luz solar para su crecimiento.
El consumo de calabazas contribuye a mantener una visión saludable, favorece el proceso de cicatrización y la producción de glóbulos rojos por su aporte en vitaminas A, C y E.
Aloe Vera. Está planta es ideal para tenerla en casa por su fácil adaptación y beneficios medicinales, no requiere de grandes cuidados, es resistente a las variaciones de la temperatura y se desarrolla normalmente en espacios con buena ventilación e iluminación, necesita de poca agua para su riego el cual puede realizarlo 2 veces por semana, y es de gran utilidad para el tratamiento de quemaduras leves, picaduras de insectos y para la cicatrización de las heridas.
Se reproducen fácilmente a través de la plantación de hijuelos que nacen en torno de la planta madre. Se recomienda desprenderlos con cuidado de manera de no dañar las raíces antes de sembrarlos por separado.
Jengibre. Para plantar se coloca un tubérculo de jengibre en una maceta o cesta con los brotes hacia arriba, sin necesidad de luz solar por lo que se puede cultivar dentro de la casa y consumir como alimento, o se deja secar para luego convertirlo en polvo y utilizarlo como condimento para las comidas.
El jengibre es de gran utilidad para el tratamiento y prevención de la gripe, dolor de garganta, tos y catarro.
Lechugas. Su cultivo es bastante rápido y se puede realizar durante todo el año a excepción de periodos muy helados. El procedimiento consiste en colocar la base en un recipiente con poca agua y suficiente luz natural, a los pocos días las raíces y las nuevas hojas aparecerán y podrá trasplantar en tierra. No requiere de mucho riego.
Rica en vitaminas A, B, C y E, en minerales como el magnesio, calcio, sodio, hierro o selenio, además de contener flavonoides que ayudan a proteger el corazón y al hígado.
Existe otro grupo de plantas aromáticas o de especias de gran utilidad en la cocina, prácticas para cultivar por el poco espacio que ocupan, entre las más utilizadas están:
Cilantro. Cómoda de cultivar en macetas previamente preparadas con fertilizantes que facilitan su crecimiento, sus tallos crecen si lo introduces en agua, una vez que las raíces sean lo suficientemente largas se procede a plantarlos en un lugar con buena iluminación en época de otoño o primavera.
Este vegetal es de gran utilidad para la preparación de comidas por su aroma y agradable sabor, además constituye una fuente rica en vitaminas A, C, E y K y en sustancias que ayudan aliviar problemas estomacales.
Albahaca. Muy utilizada en la cocina como condimento por su olor y suave sabor pero es difícil de cultivar dentro de casa ya que necesita estar expuesta al sol de 3 a 5 horas al día, para plantarla se procede a colocar varias hojas de 3 a 4 dentro de un vaso con agua y ponerlo a la luz del sol, cuando las raíces sean de un par de centímetros sembrarla en maceta y en poco tiempo se convertirá en una planta.
La albahaca es de utilidad para aliviar síntomas de bronquitis, fiebres, catarros, inflamaciones de garganta y problemas digestivos.
Perejil. Es una planta de crecimiento lento en sus primeras semanas pero muy productiva al terminar de crecer, necesita poco riego, su cultivo es más sencillo si ya compras la planta para sembrar, en el caso de semillas se recomienda colocarlas en remojo durante 24 horas para que se fijen bien a la tierra. Se adapta a todo tipo de suelos y se recomienda tenerla en macetas pequeñas para obtener una mejor cosecha, no requieren estar expuestas a la luz solar durante mucho tiempo.
Menta. Crece de forma muy expansiva ocupando bastante espacio por lo que se recomienda plantarlas en macetas individuales en cualquier época del año, es una planta de sombra y de abundante riego útil para tenerla dentro de casa.
Cebollino. Una planta ideal para cultivar dentro de casa debido a la poca luz solar que necesita para su crecimiento, no requiere de riego continuo, si la compras directamente antes de sembrarla se procede a cortar la parte superior de la planta 1/3 aproximadamente para forzar el crecimiento nuevo.
Contar con un mini huerto de plantas variadas en casa es tener al alcance de su mano una cantidad de productos naturales que le van a proporcionar una alimentación natural rica en minerales y vitaminas, de grandes beneficios para el fortalecimiento del sistema inmunológico y para la prevención y tratamiento de muchas enfermedades.
