La flor de amapola, es considerada una flor silvestre ornamental. Usada para decoraciones de espacios, jardines, así como y para realizar paisajismos.
La puedes observar en Europa, específicamente en colinas españolas, y en Asia y África. Así, como en caminos, campos y praderas. Casi siempre, son usadas para tomar fotos con fines comerciales. Como la realización de postales, folletos, o cualquier material físico alusivo al tema. A los periodistas, les fascina ir a tomar fotos de las Amapolas.
La Amapola, se caracteriza por ser una flor que dura muy poco, pero deja más de veinte mil semillas, en el suelo o terreno en el que va creciendo. Y es muy curioso para lectores del tema, porque hay algo muy peculiar, al dejar semillas en el terreno sembrado, hay unas semillas que germinan que son las que tienen la flor a la vista. Pero hay otras que pueden durar en germinar, hasta diez años.
Y bueno sucede que el suelo al ser sembrado, solo toma unas pocas. Cuando las flores se marchitan, porque tienen un tiempo de vigencia. Con el riego frecuente, permiten que vuelva a crecer la flor, y así sucesivamente. Las otras semillas dejan que las que estén en el suelo germinen, siempre, con un poco de agua.
La Amapola es una planta herbácea que florece, comúnmente a finales de primavera, entre Abril y Mayo. Y en climas cálidos durante todo el año.
Desde el punto de vista histórico, muchas personas la simbolizan como la flor de la paz. Porque bueno tiene su cuento, sucede que durante el fin de la primera guerra mundial, los terrenos, campos y praderas habían quedado devastados y el suelo estaba completamente quemado: Lo único que empezó a crecer fue la amapola. Dicen cuentistas, que la gente quedaba asombrada porque cuando veían en piso había cenizas y humo de tantas ráfagas de fuego.
Pero con todo eso, a veces llovía y el suelo húmedo hacia que se germinara esta flor. Por eso, la gente se quedaba abismada y la consideraron en su momento, un símbolo de reflexión de los momentos de conflictos vividos por la humanidad. Y un motivo que les hacía sentir, que aún estaban vivos y debían continuar sembrando y luchando por sus vidas y por lo venidero.
Esa situación hizo que los que estaban enemistados, o sencillamente ni se conocían, decidieran trabajar en equipo, para recuperar la tierra y sus vidas luego de lo terrible que habían vivido.
Ese fue uno de los motivos por los que curanderos y médicos de la época, que conocían de esta flor, decidieron expresar su fin curativo.
La amapola tiene beneficios para la mejoría de la salud, ayuda a combatir el insomnio, mejora el asma, alivia la tos y los resfriados. También, disminuye la conjuntivitis. Suele ser irritativa en estados catarrales respiratorios. Es un sedante suave y expectorante.
La Amapola tiene componentes como los alcaloides isoquinoleinicos. Entre ellos, la pavarerina y la rhoeadina, ácidos papavericos y meconico. Esto significa que es un sedante, antiespasmódico y ansiolítico natural. Este componente puede ser usado tanto en ancianos como en niños. Lo único es que en niños, el tratamiento no debe ser continuado sino muy esporádico.
Puede consumirse como complemento médico, a través de infusiones que son hechas, con una taza de agua hirviendo a la que se le agrega dos cucharaditas de pétalos secos y se dejan enfriar por quince minutos.
Se debe tomar tres veces al día. Para la realización de la tintura, hay que tomar cuatro mililitros de esta tintura, tres veces al día.
Desde el punto de vista culinario, la amapola tiene varios usos como lo son: añadidura para ensalada, las semillas se usaban para la preparación de pasteles en países como Flandes y Alemania. De allí, se extraía un aceite que era usado como condimento y con las flores se prepara un jarabe que se le añade a la sopa.
De esta planta, puedes usar las hojas y las flores, pero lo más usado son los pétalos. Estos se recogen en las mañanas y a finales de verano.
Los pétalos, se deben secar con cuidado. Sus hojas son desiguales. Crecen en terrenos secos con mucha luz solar y no necesita mucha agua. Se recomienda, con esta planta, no trasplantar mucho porque puede marchitarse.
Pero, pueden considerar que siempre crece igual y que se multiplican por semillas.
Existen varios tipos de Amapola, está la blanca, las amarillas de california, rojas carmesí, rosa en distintos tonos, las hay hasta anaranjadas.
