Las crasas y los cactus son plantas similares y a la vez diferentes. Hoy día vuelven a estar de moda, si es que alguna vez dejaron de estarlo.
¿Qué sabes de estas plantas tan peculiares?
¿Cuál te conviene más?
Regalar alguna de estas plantas es ideal, pues son fáciles de mantener, son lindos y atractivos adornos. La mayoría se da bien en interiores lo que las hace ideal para tener en oficinas, áreas de trabajo o estudio y viviendas.
Puedes seleccionar entre una amplia y llamativa variedad. Sin muchos cuidados podrás ver sus raras y hermosas flores.
CARACTERISTICAS:
En general a este grupo de plantas se las conoce como Suculentas, su característica principal es que acumulan agua dentro de ellas, lo cual las hace muy resistentes a largos períodos secos. Pueden pasar días sin recibir agua y no morir ni dañarse. Estando en macetas son susceptibles a perecer cuando reciben mucha agua. Sembradas directamente al suelo, ellas se encargan de controlar la cantidad de líquido que requieren.
Las cactáceas o cactus acumulan agua en sus troncos, poseen espinas, tienen cuerpos como globos o columnas. Su principal característica es que sus espinas están ubicadas en ‘areolas’ regadas por toda la planta. Las Crasas tienen hojas abultadas, carnosas en donde acumulan agua.
Algunas crasas tienen espinas, algunas cactáceas no tienen espinas; por esto a veces es difícil diferenciarlas.
CULTIVO:
En los establecimientos especializados se pueden adquirir semillas varias de suculentas, pero lo más común es adquirir una planta. Ya sea que la compres o te la regalen, de una planta puedes obtener muchas más. La mayoría se reproducen de forma sencilla a través de sus hojas. Solo debes tomar la hoja y colocarla en tierra. En pocas semanas tendrás una nueva planta. Algunas otras tienen ‘hijos’ que solo deben ser colocados en tierra, generando una nueva planta.
El suelo o sustrato debe ser muy permeable, una mezcla de grava, gravilla o arena muy suelta; tierra o humus nutritivo. Si se colocan en maceta, esta debe poseer un buen drenaje que evite la acumulación de líquidos.
Lo más común entre las comunidades de coleccionistas y cultivadores de suculentas, es regalar o intercambiar hojas o hijos.
Aunque se dan bien en interiores, son plantas de exterior y de sol. Si decides tenerlas en el interior asegúrate que reciban luz durante el día. Colócalas cerca de alguna ventana. En todo caso, se adaptan bien.
TEMPERATURAS:
Siendo plantas de zonas cálidas, aguantan bien las altas temperaturas, los climas secos, el sol directo. También se adaptan a las zonas más frías. Si están al exterior habrá que protegerlas de las heladas. Evitarles corrientes de aire frías.
ABONO:
No requieren mucho abono, una vez al año o cuando decidan cambiar de recipiente. Lo conveniente es utilizar un abono comercial.
INSECTOS DAÑINOS:
Los insectos son variados, sobre todo las cochinillas y algún tipo de escarabajos. A la menor señal de algún insecto, es imprescindible recurrir a algún insecticida comercial. Como primer tratamiento se debe procurar eliminar con cuidado a estos invasores.