La versatilidad de adaptación, su facilidad de manejo y su belleza, hace a cualquier planta una excelente opción al elegir qué cultivar en nuestro hogar. La Ficus Benjamina es este tipo de plantas. Es de exteriores principalmente, pero con los cuidados podemos mantenerla en una maceta dentro de casa.
Su origen es del sudeste de Asia. Es el árbol oficial de la capital de Tailandia (Bangkok). Puede alcanzar unos 20 metros de altura, de abundantes hojas con forma ovalada que varían entre los 6 y 13 centímetros de largo. Tiene hojas perennemente de color verde bien acentuado, cuya tonalidad variará solo durante su renovación en primavera, razón por la cual también es normal verle desprender algunas en dicha época.
Si se trata de un jardín, cultivar esta planta requerirá muy pocos cuidados. En condiciones naturales puede sobrepasar los 20 metros de referencia. Es común, para algunas decoraciones de exteriores, cultivarlas en líneas y mediante la poda mantenerlas bien ornamentadas. Lo adecuado es cultivarlas alejadas de tuberías y conexiones que estén bajo suelo, ya que sus raíces son invasivas y podrían ocasionar algunos daños a los sistemas bajo tierra.
Según el clima, esta planta podrá o no desarrollarse en espacio abiertos. Temperaturas por de bajo de los 15 grados centígrados afectará gravemente su crecimiento y ocasionará daños a las hojas. Por debajo de los 10 grados, la planta no podrá desarrollarse en ningún sentido.
En interiores, los cuidados van un poco más allá. Esta planta requerirá de una poda periódica. Se puede mantener con bonsái con lo que todo ello amerita. Es necesario mantenerlas con mucha luz, pero preferiblemente que no le dé directamente. Se debe mantener con buen riego sin exagerar ya que esta planta prefiere la humedad constante, pero se verá afectada por encharcamiento. Hojas amarillentas son una señal muy clara de que no se ha sido lo suficientemente generoso con el riego. Dentro de una maceta, seguramente la planta no tendrá medios para obtener los nutrientes necesarios, así que se recomienda agregar abono líquido al riego cada 15 días preferiblemente.
Deberá mantenerse un tanto alejada de fuentes de calor, sobre todo de sistemas de calefacción, cocinas, calentadores de agua, entre otros. Si por alguna razón quedaran expuestas a corrientes de aire frío podría generar una punta marrón en algunas hojas lo cual es un síntoma a considerar. Así también, verla deshojar en primavera es común, dado que algunas hojas caen para darle paso a las nuevas. Si en tiempos distintos se observa deshojar demasiado también será un síntoma que llamará la atención indicando que algo no anda bien con la planta, entre otras cosas, falta de luz. Esta planta es tan increíble, que aún perdiendo todas las hojas podrá recuperarse totalmente con los cuidados adecuados.
Es importante considerar es que ciertos cortes de tallo pueden provocar la salida de líquido lechoso sumamente irritante. De resto, serán pocos los inconvenientes que hay respecto al cultivo de esta planta y en cambio, ornamentalmente se gana bastante en interiores como planta decorativa y exteriores mucho más allá al proveer también de espléndida sombra.
