Hibiscus es la denominación asignada a una planta de cuyo género se conocen alrededor de 150 especies. Es conocida también como Hibiscos, aunque su nombre puede varias según el país. En toda Latinoamérica posee nombres diferentes, en el caso de Venezuela es popularmente conocida como cayena.
Son originarias de Asia y África. La ciudad Chengdu, ubicada en China, recibe el apodo de Ciudad Hibisco por esta planta y su flor. Es un tipo arbusto que prefiere los climas un tanto cálidos y tropicales lo cual ha facilitado su proliferación por Latinoamérica y algunos lugares de Europa.
Sus hojas son verdes y ovaladas con pintas blancas en algunas de las especies. Su flor es hermosa y, en el ámbito botánico, se ubica en la familia de las Malváceas. Las hay de variados colores como blancas, amarillas, anaranjadas, rojas, entre otras. Son generalmente de entre 10 y 15 centímetros de diámetro. El ciclo de vida de las flores es muy corto, en la mayoría de los casos de 24 horas, por lo que esta planta está en constante renovación.
No es común su cultivo en espacios internos ni tampoco en macetas, es más bien de preferencia para jardines, terrazas y alineaciones. La principal motivación que conducen a su siembra y cuidados es de tipo ornamental, sin embargo, según la especie son aprovechadas con fines estéticos y de salud mediante la preparación de infusiones de su flor.
Una de las especies mundialmente popular es la Hibiscus sabdariffa de color rojo bastante intenso la cual también es conocida como Flor de Jamaica. La infusión obtenida con esta flor, Agua de Jamaica, posee un conjunto apreciable de propiedades, beneficiosas de forma cosmetológica y medicinal, por lo cual es común su comercialización en una gran variedad de marcas y se pueden conseguir en supermercados, farmacias, tiendas y todo tipo de establecimientos.
Las flores de Hibiscus son también utilizadas para combatir la caída del cabello. Unas cuantas flores se colocan a remojar durante una noche en varios litros de agua y al día siguiente se obtendrá algo como una solución parecida al shampoo. Esta solución sirve para darle brillo al cabello, fortalecer los folículos pilosos y en general para reparar todo el cabello revitalizando el cuero cabelludo. Otra forma de usarlas es triturando las hojas y pasarlas directamente por el cabello después del baño.
Algunos cultivos están motivados por otros beneficios. La Hibiscus cannabinus (también conocida como Kenaf), es aprovechada para la obtención de fibras en la fabricación de papel a partir de sus largos tallos que pueden alcanzar, en algunos casos, hasta 3 metros de alto. Su flor también provee de materia prima para elaboración de papel. Esta especie de Hibiscus tan particular es cultivada en procesos anuales muy sistemáticamente en algunos países para proveer de materia prima a las fábricas de papel.
En conclusión, las Hibiscus es una planta maravillosa tanto en lo ornamental como en los beneficios que proveen sus flores, siendo los cuidados necesarios muy básicos. Así que, cultivarla nos ayudará a embellecer nuestro jardín y además a tenernos provistos de un elemento con el podemos ayudarnos a cuidar de nuestra salud.