Seguramente has visto, usado o consumido aceite de oliva y en algún momento te preguntaste: ¿de dónde se obtiene este aceite? Pues, su respuesta es simple viene del olivo, planta que produce las aceitunas. Así que, como ves, este es un árbol muy importante para la gastronomía a nivel mundial.
El olivo, o aceituno como se le llama en algunas partes, es un árbol mediterráneo y aunque posee características algo rusticas, posee requerimientos que le hacen desarrollarse mejor en ese tipo de zonas, puesto que es muy exigente con respecto al clima. Ambientes muy fríos pueden dañarlo y tampoco prefiere los ambientes muy lluviosos, es en cambio poco exigente en cuanto a agua o riqueza del suelo, por lo que se le puede encontrar en terrenos pedregosos. Es muy hermoso en etapa adulta y posee cualidades que pocos conocen, ya que si bien conocemos sus frutos no todos han disfrutado del espectáculo visual de este majestuoso árbol. Su crecimiento es bastante lento, pero en recompensa a su espera es muy longevo y se dicen que algunos han alcanzado hasta los 2000 años.
Sus hojas siempre verdes, perennes, abundantes y de forma alargada adornan la copa irregular de un tronco y ramas contorneadas y nudosas que forman un espectáculo visual de hasta diez metros de altura. Sus frutos (los mas conocidos) se les llama olivas o aceitunas, son carnosas y con forma ovalada, cuando están verdes poseen un color verde muy característico –verde aceituna– al madurar toman un tono rosáceo hasta llegar a negra en su etapa final, además posee, un centro o semilla dura que en gastronomía se le llama hueso.
España es el país que tiene más cosechas de olivo, seguida por Italia, Grecia, Marruecos y en Suramérica en Chile y Argentina. Es muy demandado por sus frutos con los que se comercializa en su estado verde, maduro y extracción de aceite como ya lo hemos dicho. Son muy conocidas y preparadas las olivas de mesa, esto no es más que conservarlas para poder usarlas a diario en nuestra cocina.
Olivas de mesa: se obtienen verdes directamente del árbol, debido a su alta concentración de taninos es necesario ponerlas en remojo varias veces en agua salada, mientas más remojes más taninos va liberando aligerando su sabor. Para finalizar se colocan en salmuera (hasta que ya no se disuelva la sal) y puedes aliñar con variedad de especies para mejorar aun mas su sabor con hinojo, pimientos, limón, laurel, orégano, romero, tomillo entre otras. Se tapan herméticamente y se conservan en el refrigerador para ir consumiendo de a poco o mucho, según sea tu gusto.
Además del uso gastronómico, el olivo representa mundialmente a la paz, es por ello que en la simbología de la paloma de la paz ésta lleva una rama de olivo en su pico y la bandera de las Naciones Unidas, dos ramas de olivos entrelazadas arropan al globo terráqueo. Conjuntamente, en la antigua Roma representaba la victoria, por ello se les veía a los guerreros triunfadores con coronas hechas de ramas de olivo.
En otro orden de ideas posee además cualidades médicas, puesto que es un antiglucémico natural, que por supuesto trae numerosos beneficios a personas con diabetes y otras complicaciones de la misma como las inflamaciones del hígado, cálculos y presión arterial. Igualmente, es excelente para mejorar y restaurar el cabello, uñas y piel. Por ello el olivo se presenta desde la antigüedad como un regalo propio de los dioses para la humanidad.
